JUANA DE ARCO | La Doncella de Orleans

JUANA DE ARCO ENTRE DOS MIRADAS

Es posible que la popularidad de algunos destacados médiums brasileños a nivel mundial, la expansión masiva del Espiritismo en Brasil, y su estrecha cercanía con la religión, haya hecho que muchas personas se concentren más en las obras mediúmnicas modernas, como las de Chico Xavier, que en las fuentes clásicas como las de León Denis, continuador del espiritismo. 

Esto ha llevado a que muchas ideas se difundan con fuerza, sin que sean suficientemente confrontadas con la metodología del Maestro Allan Kardec, ni con los principios filosóficos, científicos y morales que defendía con tanta claridad LA PLUMA DE ORO, EL APÓSTOL DEL ESPIRITISMO Maestro León Denis.

LEÓN DENIS: fiel continuador del Maestro Allan Kardec, escribió sus Obras a partir del estudio profundo, la razón esclarecida y, sobre todo, del recuerdo de sus propias experiencias espirituales. Fue un espíritu consciente de sí mismo, que pudo acceder a vivencias pasadas y plasmarlas con autenticidad. Así lo hizo en su Obra Juana de Arco, Médium, donde no narra versiones dictadas por terceros, sino hechos que él mismo, cómo espíritu conocedor de la verdad, pudo testimoniar y plasmar con su propia mano.

CHICO XAVIER por su parte, fue un médium de vasta producción, con 450 libros aproximadamente, dictados por distintos espíritus. Sin embargo, a pesar de su masiva narración, y de conocer la Obra del Maestro León Denis, JUANA DE ARCO MÉDIUM, presenta una versión contraria a la del Apóstol del Espiritismo, dictada por el espíritu de Humberto de Campos, donde afirman que Juana de Arco es el espíritu de Judas Iscariote en redención. Esta afirmación carente de pruebas doctrinarias contradice abiertamente el testimonio del propio Maestro León Denis, quien habló de Juana de Arco desde su propio espíritu, y no por voces ajenas.

Sé que muchos de vosotros pediréis respeto por figuras veneradas como Chico Xavier o Humberto de Campos, y con justa razón. También yo, guiado por el pensamiento firme y luminoso del Maestro León Denis, pido respeto por aquella a quien reconozco como un Espíritu Superior; Juana de Arco.

Pero si vosotros afirmareis tener derecho a profundizar en lo que consideráis verdad; entonces, ¿Por qué negarlo a quien se esfuerza, no desde el prejuicio, sino desde el estudio, la coherencia espiritual y la fidelidad a los principios de la Doctrina Espírita?

No critico por costumbre ni por deseo de escándalo; examino. No descalifico personas, sino que confronto ideas cuando ellas contradicen lo que el alma recuerda y la Ley confirma.

Hermanos de mi espíritu; no basta decir fue revelado. Hay que interrogar la revelación bajo la luz de los principios eternos, porque si Juana de Arco ha sido desfigurada por los hombres, tanto como Jesús lo fue por las religiones, entonces toca al espiritista verdadero, no al fanático, ni al devoto ciego, sino al discípulo sincero del Espíritu, restaurar la verdad.

JUANA DE ARCO, SEGÚN EL MAESTRO Y CONTINUADOR DEL ESPÍRITISMO LEÓN DENIS.

Juana de Arco es un espíritu elevado, inspirado por el Genio Celta, mensajera ante el Padre Supremo, con una misión redentora para Francia.

Juana de Arco, muestra desde niña, dones espirituales, mediumnidad lúcida, valor moral, y una pureza que se expresa en su servicio a su patria y a Dios. Sufre por una causa noble sin rastro de culpa explícita.

El Maestro León Denis estudia sus visiones, su carácter, sus actos, los analiza con los criterios de elevación espiritual propuestos por el Maestro Allan Kardec. Nunca afirma sin sustento filosófico, moral ni científico. Enaltece a Juana de Arco como símbolo de mediumnidad elevada, patriotismo espiritual, y entrega a la Voluntad Divina.

JUANA DE ARCO, SEGÚN CHICO XAVIER Y HUMBERTO DE CAMPOS

El primero, un espíritu desencarnado, afirma al segundo, un espíritu encarnado, y éste cree y divulga como una verdad inmutable que, Judas Iscariote reencarnó como Juana de Arco para expiar sus faltas. Crónicas del Más Allá de la Tumba (espíritu Humberto de Campos, médium: Chico Xavier).

Estos dos espíritus, hermanos de mi espíritu, dicen que Juana de Arco muere en la hoguera (sufrimiento físico), hecho que ellos interpretan como expiación por el suicidio y traición cometido en su vida anterior como “Judas”

El problema metodológico radica en que no hay verificación ni control cruzado, ni análisis doctrinario de la veracidad del espíritu comunicante ni de la lógica expuesta de esa teoría, porque se presenta como una afirmación revelada sin pasar por el método que el Maestro Allan Kardec exigía: universalidad, concordancia, análisis racional, moral, científico y lógico; reduciendo ante sus adeptos, la grandeza de Juana de Arco como figura inspiradora, tratándola como un Judas reencarnado.

ANÁLISIS SEGÚN LAS LEYES ESPIRITUALES

1- LEY DE REENCARNACIÓN:

Según el contenido de las Obras auténticas y maravillosas del Maestro León Denis, no hay indicios que relacionen a Juana de Arco con Judas Iscariote, ni con una expiación personal, sino con una misión espiritual. Por el contrario, considera su origen espiritual como de un Espíritu elevado, heroico, instrumento de la Providencia, guiada por el Espíritu Azul. 

Chico Xavier y Humberto de Campos, afirman que Judas Iscariote reencarnó como Juana de Arco, sin proceso comprobatorio, más que por su palabra plasmada en Crónicas del Más Allá de la Tumba. Chico Xavier no prueba su afirmación, la da por cierta e inmutable, sin aplicar el control universal ni método racional.

2- LEY DE CAUSA Y EFECTO

Según las Obras del Maestro León Denis, Juana de Arco presenta una armonía psicológica y espiritual que no corresponde a un alma con necesidad de expiación. Su muerte se produce por la incomprensión de los sectarios religiosos, y como sacrificio sublime en cumplimiento de una misión Divina. El mártir puede no ser un expiador, sino alguien que asume una causa en servicio superior.

Chico Xavier y Humberto de Campos, dan por hecho que la hoguera es expiación por el suicidio, sin que el espíritu de Juana de Arco muestre rastros de desequilibrio mental ni moral. Afirman que expía sus crímenes pasados como Judas Iscariote, siendo quemada viva por sus faltas. Chico Xavier reduce su grandeza y su luz, a la de un espíritu deudor.

3- MEDIUMNIDAD SERIA

El Maestro León Denis, aplica análisis riguroso, racional y ético; consulta hechos históricos y morales. Basado en estudio histórico-espiritual, investigaciones y análisis filosófico-doctrinario; pues, el Maestro Allan Kardec exigía el control universal del espíritu y la concordancia de diversas fuentes serias.

Chico Xavier y Humberto de Campos, hacen revelaciones sin someterlas a revisión doctrinaria ni universalidad; son la única autoridad. Presenta una narrativa literaria y emocional sin cotejo ni prueba de identidad mediúmnica.

4- MÉTODO CIENTÍFICO- ESPIRITA

El Espiritismo no acepta revelaciones individuales como dogma, por más respetado y conocido que sea el médium.

El Maestro León Denis, se apoya en hechos, comparación, razonamiento, investigación racional, histórica, espiritual.

Chico Xavier y Humberto de Campos, no acuden a dicho método; la revelación se basa sólo en la confianza de la palabra de Chico Xavier, sin cuestionamiento ni debate, asumida como verdad inmutable por sus simpatizantes. Aquí se evidencia un fallo metodológico. Chico Xavier no aplica el método kardecista, sino una creencia emocional.

5- JUANA DE ARCO COMO GUÍA MORAL

El Maestro León Denis, la presenta como guía para Francia, símbolo de fe, pureza y sacrificio. Los espíritus de alta moral se reconocen por su lenguaje, obras y coherencia con la Ley Divina. El Maestro eleva a Juana de Arco como modelo.

Chico Xavier y Humberto de Campos, la degradan en su origen; la convierten en Judas Iscariote. Chico Xavier la rebaja sin mostrar el progreso intermedio, sin una prueba clara de identidad.

JESÚS Y JUDAS

Según Chico Xavier y Maria de Carvalho Leite:

Tocado por la compasión, Jesús visita el espíritu atormentado de Judas tras su suicidio y lo consuela después de su muerte. Fue a encontrarse con el loco espíritu de Judas, permaneciendo a su lado durante tres días hasta que logra calmar su sufrimiento y se duerme.

Héctor Fabio Cardona, según las Leyes Espirituales

Jesús, como Espíritu puro, puede asistir a sus hermanos, pero la redención es por méritos propios, no por excepción. La escena puede interpretarse simbólicamente; pero decir que Jesús lo hizo dormir, sin contexto doctrinal ni prueba, rompe con el principio de que no hay favoritismos espirituales, ni excepciones arbitrarias.

CONCLUSIÓN OBJETIVA SIN FANATISMO

¿Qué es más acorde al método espírita de Allan Kardec...?

El Maestro León Denis sigue los pasos metodológicos; estudio, comparación, razonamiento moral y filosófico.

Chico Xavier, aunque puede tener méritos personales y morales, cae en revelaciones que se alejan del control doctrinario exigido por el Maestro Allan Kardec.

¿Cuál versión es más coherente con las Leyes Espirituales?

La expiación requiere encarnación consciente del propósito reeducador.

Juana de Arco, según las Obras del Maestro León Denis, no actúa como alma en reparación, sino como espíritu misionero.

Judas Iscariote, de acuerdo a la codificación que el Maestro Allan Kardec hizo con la Enseñanza que entregaron los Espíritus Superiores, tendría que reencarnar en condiciones acordes a su culpa (desesperación, suicidio), pero con pruebas y luchas morales, no con una misión tan elevada y lúcida como la que encarna Juana de Arco. 

Presentan a Judas Iscariote, tal y como presentan a André Luiz después de desencarnar en medio del vicio del alcohol y bajas pasiones; y, sin encarnar y expiar, se convierte en guía espiritual.

¿QUÉ DICE LA LEY ESPIRITUAL?

Que nadie se exime del trabajo de redención en la carne, y que la moral de un espíritu se mide por sus frutos, no por sus títulos ni por las emociones que despierta en el médium.

Héctor Fabio Cardona:

Si aceptamos como hace Chico Xavier en ese mensaje de Humberto de Campos, que morir en la hoguera equivale a pagar una culpa, entonces habría que aplicar el mismo razonamiento a otras muertes dolorosas y verdaderamente injustas.

Jesús murió de forma brutal en la cruz, torturado y humillado, siendo inocente.

Entonces, si seguimos la lógica de esa afirmación de Chico Xavier y Humberto de Campos, Juana de Arco muere en la hoguera porque fue Judas Iscariote, y estaba expiando el peso de sus faltas.

Jesús muere en la cruz en medio de tormentos y malos tratos: ¿Estaba entonces expiando también? ¿Por qué motivo, si era puro?

He aquí un gran conflicto doctrinario…

INCONGRUENCIA DOCTRINAL DE CHICO XAVIER Y HUMBERTO DE CAMPOS

Según la lógica de la Ley de Causa y Efecto; el sufrimiento no siempre significa expiación, sino que puede ser también, prueba voluntaria asumida por Espíritus Superiores para ayudar a la humanidad.

MISIÓN REDENTORA PARA DESPERTAR CONCIENCIAS

Jesús no vino a pagar culpas personales; no tenía deuda con la Ley Espiritual. Se ofreció como modelo y guía, soportando el dolor humano para redimir con el ejemplo y despertar conciencias. Lo dijo claramente: Yo doy mi vida, nadie me la quita.

Juana de Arco, tampoco mostró desequilibrio moral. Desde niña fue guiada por voces de Espíritus Superiores. Aceptó su destino con fe, sin rebeldía, y nunca manifestó desesperación suicida.

¿Por qué habría de cargar con la deuda de Judas Iscariote, cuando actuó con heroísmo, obediencia a Dios y entrega a una causa? Entonces; ¿Qué dice el verdadero Espiritismo?

Sufrimiento y persecución no es sinónimo de culpa. Los grandes sufrimientos de algunos hombres justos no son expiaciones, sino pruebas voluntarias que tienen un propósito educativo o misionero; y lo confirma el Maestro León Denis en su libro El Problema del Ser y del Destino: El dolor de los justos es una llama de purificación para el mundo, no castigo para el alma.

Entonces, si se consideran que Juana de Arco murió en expiación, también habría que considerar a Jesús como un culpable, lo cual es absurdo y contrario al mensaje de justicia y pureza que Él representa.

Por tanto; la explicación de Chico Xavier y Humberto de Campos se desmorona con la lógica doctrinaria y la Ley Espiritual.

El Maestro León Denis sostiene la verdad espiritual; la Doncella Juana de Arco fue un alma en misión como Jesús, como Sócrates, Krishna, Buda, como tantos otros que dieron su vida, no por las causas de sus espíritus, sino por amor a la humanidad.

NOTA: El Maestro León Denis, en su Obras, considera a Juana de Arco enviada para una misión, no una expiación. Chico Xavier no prueba su afirmación; la da por cierta a través de su mediumnidad, sin aplicar el control universal ni método racional.

EL JUICIO Y LA CALUMNIA RELIGIOSA

Ella sabía que sería entregada. Lo aceptó con la fuerza de los grandes espíritus que vienen a la Tierra a enseñar con el ejemplo.

El Maestro León Denis dedica varias secciones a denunciar la injusticia de su proceso eclesiástico, donde se intentó hacer pasar por herejía su mediumnidad.

Muestra cómo los jueces estaban parcializados, y cómo el Vaticano no entendía la naturaleza de sus dones espirituales.

El juicio fue un error de los hombres, no una señal de error en su Espíritu como asegura Chico Xavier y Humberto de Campos. Pero sabed; Aquella que fue llamada bruja por sus jueces, mártir por su pueblo y santa por quienes la asesinaron, no murió por sus errores sino por su fidelidad a lo invisible, por su obediencia al Mandato Divino.

LA POPULARIDAD Y LA FIDELIDAD A LA VERDAD

El hierro es el mineral más abundante; está por todas partes. En la tierra, en nuestras construcciones, en los utensilios de la vida diaria…. Sin embargo, al contacto con el aire sin una capa de pintura que lo cubra, se oxida, pierde su forma, se corrompe. 

El oro, por el contrario; es raro, discreto, profundo. Brilla por sí solo sin necesidad de ornamentos ni de masas que lo aclamen. Su esencia es incorruptible. Su átomo fino y perfecto, resiste el tiempo y el olvido.

Así también ocurre con las obras espirituales; muchos se han acercado al Espiritismo a través de caminos populares, por libros que, como el hierro, se multiplican, abundan y se tornan familiares en las librerías, en los altares domésticos, en las redes de consuelo, pero no por ello son necesariamente incorruptibles. Al contrario, cuanto más se alejan del método del Maestro Allan Kardec, cuanto más se revisten de emociones sin análisis, más riesgo tienen de oxidarse, de confundir, de sustituir la razón por el sentimentalismo.

Y es entonces cuando surge la figura olvidada, luminosa y firme del Maestro León Denis. Menos citado, sí; menos leído, también; menos comprendido, por supuesto... pero infinitamente más fiel al pensamiento original. Sus escasas Obras, como el oro, no yacen en la superficie, accesibles a la curiosidad de la popularidad, sino que reposan en lo profundo silencioso de las estanterías del espíritu, esperando al buscador sincero, porque no entretienen, iluminan; no distraen, elevan; no halagan, transforman.

Y por eso, que su eco resuena con la sobriedad de la verdad, no con el bullicio de la moda. No se dispersa en revelaciones imprecisas, sino que se apoya en la historia, en la filosofía, en el análisis riguroso de las leyes que rigen a los espíritus.

¿Quién, con sed de verdad, podría no conmoverse ante su visión de Juana de Arco?

No como mártir de leyenda, sino como médium consciente, como espíritu misionero, como encarnación del deber y la obediencia al mundo invisible. Su historia, lejos de ser un simple relato emocional, es prueba fehaciente de cómo los espíritus más nobles pueden encarnar el sacrificio sin mancharse de castigo. Y, sin embargo, su voz es menos escuchada; quizá porque no se impone; quizá porque no promete alivio inmediato, sino esfuerzo, estudio y despertar. Pero para el que busca con el alma encendida, El Maestro León Denis es luz, es guía, es brújula, es roca en medio del oleaje tempestuoso de las doctrinas modernas que, por su abundancia, han hecho del hierro un símbolo de buena intención, pero no siempre de verdad imperecedera.

Que nadie se confunda; no desprecio lo sincero que haya en las corrientes populares; pero sí advierto con la firmeza de quien ama el conocimiento, que el oro no se encuentra en cualquier parte, y que la verdad no siempre es la más aplaudida, pero sí la más elevada.

Sólo cuando se vuelva a estudiar al Maestro León Denis como se estudia al sabio, el Espiritismo retornará al brillo que tenía en sus albores; al brillo del oro espiritual que, ni el tiempo ni los errores de los hombres pueden opacar o apagar.

El Espiritismo, en su esencia más pura, sigue el método que el Maestro Allan Kardec estableció como luz en medio de la oscuridad humana; la observación rigurosa, la coherencia doctrinal y la aplicación de las Leyes Espirituales universales. Es con esta base, que el Maestro León Denis, uno de sus continuadores más fundamentales, nos ofrece una visión clara y profunda sobre la Ley de Causa y Efecto, la Reencarnación y la Expiación.

El Maestro León Denis, lejos de caer en interpretaciones ligeras o en visiones que pudieran distorsionar la grandiosidad del proceso espiritual, se presenta como un firme defensor de la Justicia Divina y del equilibrio que debe existir entre el amor, la expiación y la evolución del espíritu. 

La figura de Juana de Arco, para León Denis, no es sólo la de una mártir histórica, sino un espíritu en misión, cuya vida y sacrificio en la Tierra cumplen con los propósitos de Dios Todopoderoso Infinitamente Justo. Sin embargo, en el marco del Espiritismo brasileño, especialmente a través del médium Chico Xavier, encontramos una interpretación que difiere sustancialmente de la del Maestro León Denis.

En su obra, y a través de los relatos de Humberto de Campos, la figura de Juana de Arco es presentada bajo un prisma diferente, despojándola de la profundidad que el Maestro León Denis le otorga; resaltando su sufrimiento como una consecuencia más de una expiación que parece diluir la magnitud de su misión espiritual. Esta interpretación, aunque profundamente sentida y transmitida con el objetivo de enseñar, no se alinea necesariamente con los principios fundamentales establecidos por el Maestro Allan Kardec.

El hecho de que la obra de Chico Xavier haya cobrado tanta relevancia, especialmente en Brasil, se debe en parte a la emotividad y accesibilidad de sus mensajes contenidos en 450 populares libros, pero también a la simpatía que despierta entre aquellos que buscan respuestas rápidas y consoladoras. Sin embargo, al analizar los aspectos fundamentales del Espiritismo y su doctrina, es imperativo recordar que la verdad espiritual no se construye sobre la base de la emoción, sino sobre la razón y la reflexión profunda.

La vida y misión de Juana de Arco, tal como la presenta el Maestro León Denis, nos invita a reflexionar sobre el papel de la mujer en la historia espiritual, sobre la fuerza del espíritu humano frente a las adversidades, y sobre la constante oportunidad que todos los seres tienen de superar sus propias sombras a través del amor, el sacrificio y el cumplimiento de una misión.

Por todo esto, es esencial que, al abordar temas tan delicados como la figura de Juana de Arco, nos mantengamos firmes en la necesidad de profundizar más allá de las versiones más accesibles o populares como las que nos presenta Humberto de Campos a través Chico Xavier. 

La coherencia con las Leyes Espirituales debe ser siempre la guía por excelencia que ilumine nuestras investigaciones y nuestras conclusiones.

El Maestro León Denis, como fiel discípulo del Maestro Allan Kardec, nos recuerda que el Espiritismo no es una doctrina de consuelo fácil, sino una guía de transformación profunda del ser. Y es en esta profundidad donde debemos buscar las respuestas sin sucumbir a la tentación de las explicaciones simplistas o emocionales de las novelas espirituales que a menudo alejan de la verdad.

En su Obra Juana de Arco, el Maestro León Denis se refiere a ella como un ser de gran nobleza espiritual, destacando su misión como una encarnación destinada a cumplir una tarea superior. A lo largo del libro, no sólo narra su historia, sino que también examina profundamente la espiritualidad de Juana de Arco, enfocándose en su conexión con el mundo Espiritual Superior.

En esta Obra, el Maestro León Denis resalta que Juana de Arco, más que una simple joven guerrera, que nunca manchó sus manos con sangre de sus hermanos, era una médium en el sentido más alto de la palabra. Ella recibía Mensajes Divinos y espirituales que guiaban su vida y sus acciones. Las voces que ella oía, según el Maestro León Denis, eran manifestaciones de seres espirituales elevados como el Arcángel Miguel, que guiaban su misión. En este sentido, podemos considerar que Juana de Arco fue una médium, aunque no en el sentido contemporáneo de alguien que se dedica exclusivamente a la comunicación con los espíritus, sino como alguien que recibía instrucciones de un Plano Superior como parte de su misión espiritual.

El Maestro León Denis describe a Juana de Arco como una figura excepcional que, a través de su mediumnidad, pudo llevar a cabo su misión de liberar a Francia. Él también subraya la pureza de su vida y su integridad moral, a diferencia de la distorsión que se han hecho de su figura en la historia.

Por lo tanto, en la Obra Juana de Arco Médium, el Maestro León Denis no sólo presenta a la Doncella de Orleans como una mujer de gran valor y coraje, sino también como una médium que actuó bajo la influencia y dirección de Espíritus Superiores. Esta visión está en línea con la comprensión espírita de que las misiones de ciertos espíritus como Juana de Arco, son guiadas por Espíritus Superiores, que les proporcionan la fuerza y la dirección necesarias para cumplir la tarea encomendada por aquella Majestad Divina.

Vuestro amigo, hermano y servidor,

-Héctor Fabio Cardona-